Boda entre agua.-
Él la esperó con el agua hasta los tobillos. Ella caminó entre olas, con su vestido flotando… Y frente a un altar cubierto por el agua, dijeron: “Sí, acepto.” Ni la lluvia, ni el tifón, ni la inundación más cruel pudieron detener su boda. Porque el amor —cuando es verdadero— no se ahoga. Se sostiene. …