Efemérides.-
Un día como hoy, pero del año 1937, muere el tío Benjamín.
Al hombre se le conoce por la huella que deja en la vida. La existencia del señor Benjamín F. Johnston, nos conduce a Los Mochis, descubriendo en definitiva a su fundador.
El 10 de marzo de 1937 muere en Hong Kong, durante un viaje por el oriente en compañía de su esposa, la señora Agnes Sherwood Johnston. Nunca se imaginó Agnes que después de haber desayunado con su esposo, el regreso a la habitación sería su último respiro.
Cuando llegó la noticia de su muerte a Los Mochis, el silbato del pitón del ingenio anunció la tragedia. Durante una hora las máquinas pararon, los trabajadores dejaron de laborar en señal de duelo, porque no solamente había muerto el patrón, sino porque se iba quien diera vida a la ciudad.
Esta maravillosa ciudad donde hoy vivimos, es el resultado del esfuerzo de un hombre visionario, con la mentalidad de cumplir un sueño, el de construir una gran empresa azucarera, donde alrededor de ella nace una próspera y moderna ciudad, con grandes oportunidades.
Sus restos aún descansan en Hong Kong, donde nos esperan para su regreso y darle el lugar que le corresponde en esta ciudad, como era su voluntad.
Para el Sr. Rosario Grijalva, quien fue vicepresidente del Ingenio Azucarero, Johnston, era un hombre único, que nunca se rindió en las situaciones más difíciles, por adversidad de los negocios, por mala situación económica o por cualquiera otra causa, jamás se vio abatido. Seguramente por su fuerte carácter, por su conciencia y gran capacidad.
Siempre fue erguido, talentoso, enérgico, de gran valor civil y en el terreno de los negocios suficientemente hábil. Cada fracaso lo consideraba como una lección que aprovechaba, analizando las causas para corregirlas y emprender de nuevo.
Decía que la palabra “imposible” no debería existir en el diccionario.
