En marzo de 2022, el carguero Felicity Ace, que transportaba cerca de 4,000 vehículos de lujo valorados en más de 407 millones de dólares, se hundió en el Atlántico tras un incendio incontrolable. A bordo había automóviles de marcas como Porsche, Audi y Lamborghini. Pese a los intentos de rescate, el barco terminó en el fondo del océano cerca de las Azores, generando preocupaciones por los daños ambientales causados por los combustibles y materiales liberados.