Desde El Fuerte Sinaloa, noviembre 21, 2024

ANUNCIA MIGUEL LOAIZA QUE CONTINUARÁN OPERATIVOS DE SUPERVISIÓN SORPRESIVOS EN EL TRANSPORTE PÚBLICO.

ANUNCIA MIGUEL LOAIZA QUE CONTINUARÁN OPERATIVOS DE SUPERVISIÓN SORPRESIVOS EN EL TRANSPORTE PÚBLICO.

Los daños financieros generados por la pandemia no justifican irregularidades, ni mal trato a usuarios, aclara

En respuesta a las demandas de cientos de miles de usuarios diarios, la Dirección de Vialidad y Transportes continuará la ejecución de operativos de supervisión del servicio público de transporte (la mayoría de manera sorpresiva), en acato al compromiso de la dependencia, en uso de sus facultades legales y bajo la consideración de que los perjuicios financieros generados por la pandemia de Covid-19 no justifican irregularidades ni maltrato a pasajeros, sobre todo del transporte urbano, dijo Miguel Loaiza Pérez.

Como ejemplo de ello, el titular de la DVyT informó que los días 24 y 25 de junio, en coordinación con el Jefe de Inspectores de la Zona Sur del estado, Guillermo Tolosa, encabezó una jornada de supervisión del transporte público del servicio urbano, turístico, regional, taxis, aurigas y pulmonías en Mazatlán, donde se levantaron 45 boletas (52 infracciones) y se procedió a la detención de un vehículo irregular.

Un mes antes (los días 26 y 27 de mayo), en la misma ciudad, Loaiza ordenó un operativo sorpresivo en el que se elaboraron 178 boletas con 194 infracciones.

En esa jornada trabajaron de manera coordinada el subdirector de Transportes, Rubén Medina; Roger Urrea, Jefe estatal de Inspección del Transporte, así como los elementos de supervisión del puerto y Guillermo Tolosa, Jefe de Inspectores de la Zona Sur de Sinaloa, región en la que queda comprendido el municipio y la ciudad de Mazatlán.

La mayor parte de las infracciones impuestas sancionan a los permisionarios de las diferentes modalidades por no cumplir condiciones de capacidad, eficiencia, seguridad y decoro en la prestación del servicio público concesionado; no portar en el vehículo la tarjeta de circulación original, mal estado físico mecánico de las unidades y, sobre todo en Mazatlán, utilizar bocinas con volumen alto y molestas para los turistas y la población en general.