En 1971, la construcción de las icónicas Torres Gemelas en Nueva York marcó un hito en la historia de la ingeniería y la arquitectura. Con 110 pisos cada una, las torres se levantaban majestuosamente sobre el horizonte de Manhattan, simbolizando el poder económico y la innovación tecnológica de la época.
La complejidad de su construcción fue un verdadero desafío para los ingenieros, quienes utilizaron técnicas pioneras como el diseño de núcleo de acero y concreto, lo que permitió la altura récord de los edificios. A lo largo de su construcción, las imágenes mostraban cómo estas gigantescas torres tomaban forma, transformando el skyline de la ciudad.
Las Torres Gemelas no solo eran un símbolo de progreso, sino también una proeza de la ingeniería estructural que impactó al mundo entero.
