El Goat Canyon Trestle, situado en San Diego, California, es el puente ferroviario de madera más largo del mundo. Construido con vigas de secoya, este impresionante puente se extiende 185 metros y alcanza una altura de casi 57 metros. Es parte del tramo conocido como el Desfiladero de Carrizo, una sección de la ruta ferroviaria que recibió el apodo de “el ferrocarril imposible” en 1919 debido a las extremas dificultades técnicas y logísticas que implicaba su construcción. Este emblemático puente es un testimonio de la ingeniería de principios del siglo XX que a día de hoy sigue siendo una maravilla arquitectónica.