Desde El Fuerte Sinaloa, julio 7, 2025

Movimiento Ciudadano en Sinaloa: Avances, retrocesos. El dilema del liderazgo en Sinaloa.-

BREVE Y PRECISO.

DOMINGO FÉLIX TORRES.

Movimiento Ciudadano en Sinaloa: Avances, retrocesos. El dilema del liderazgo en Sinaloa.-

Movimiento Ciudadano (MC) en Sinaloa ha tenido una trayectoria errática, por momentos prometedora y por otros desconcertante.

Como suele decirse en la jerga popular, ha caminado “como la burrita”: Un paso adelante y otro hacia atrás.

Y es que, aunque para muchos MC parece un proyecto reciente, lo cierto es que acumula ya más de 25 años de historia desde sus días como Convergencia por la Democracia.

A lo largo de este tiempo, el partido en Sinaloa ha pasado por distintas manos, momentos y oportunidades.

Sin embargo, pocas veces ha tenido el grado de presencia política que logró bajo el liderazgo de Sergio Torres Félix, político sinaloense que, tras una larga carrera en el PRI, decidió dar el salto a Movimiento Ciudadano, llevándose consigo experiencia, estructura y oficio.

Torres, ha demostrado que no solo sabe construir candidaturas, sino también estructuras territoriales. prueba de ello es que hoy MC cuenta con regidores en 14 de los 20 municipios de Sinaloa, un logro significativo considerando que dos de esos municipios son de reciente creación y aún se rigen por juntas municipales.

En términos políticos, esto representa una consolidación territorial que ningún otro dirigente de MC había conseguido en el estado.

La decisión de Sergio Torres de abandonar el PRI fue vista en su momento con escepticismo por algunos y con desdén por otros.

No era fácil dejar el partido en el que fue todo: Mozo en el ayuntamiento, regidor, diputado, secretario estatal y alcalde de Culiacán.

Pero, como pocas veces ocurre, el cambio de camiseta fue un acierto tanto para él, como para Movimiento Ciudadano.

MC ganó un operador político curtido, con capacidad de convocatoria y con una narrativa clara para presentarse como opción distinta ante un PRI en decadencia, un PAN sin brújula y una izquierda morenista cada vez más vertical.

No hay que olvidar que Sergio Torres estuvo muy cerca de ser el candidato a gobernador por el PRI en 2016.

Su nombre sonaba con fuerza, pero terminó siendo desplazado por Quirino Ordaz Coppel, quien llegó al poder respaldado por estructuras federales, principalmente con el apoyo del entonces presidente Enrique Peña Nieto y de operadores del Ejército que inclinaron la balanza a su favor.

Fue una jugada de poder que dejó claro quién mandaba, pero también sembró una deuda moral en la historia reciente de la política sinaloense.

Hoy, pese al trabajo visible y sostenido de Torres en MC, la dirigencia nacional del partido parece decidida a desbancarlo.

El Comité Ejecutivo Nacional, encabezado por Dante Delgado, ha promovido la idea de entregar el control del partido en el estado a Sergio “El Pio” Esquer, político con presencia empresarial, pero sin la trayectoria política ni los resultados de Torres.

Nadie pone en duda que “El Pio” pueda aportar al proyecto de MC. Su conocimiento local y sus ganas de participar son válidos.

Pero otra cosa muy distinta es pretender que puede sustituir a un dirigente como Torres, cuya capacidad para construir, negociar y mantener al partido a flote ha quedado demostrada.

Si Movimiento Ciudadano quiere crecer en Sinaloa, necesita sumar, no dividir; necesita humildad estratégica, no imposiciones desde la cúpula.

El error del CEN radica no en abrir el espacio a nuevos perfiles —lo cual es sano—, sino en menospreciar el trabajo de quien ya ha entregado resultados.

En política, la memoria es corta, pero los agravios pesan.

Y si MC insiste en imponer desde la ciudad de México decisiones que contradicen la realidad local, corre el riesgo de desfondarse justo cuando empieza a ganar terreno.

El llamado es claro: Sergio Torres no debe ser desplazado, sino respaldado.

Y “El Pio” Esquer, si verdaderamente quiere aportar al proyecto, haría bien en sumarse con humildad y no como instrumento de una jugada nacional que huele más a cálculo político que a visión de futuro.

MC en Sinaloa tiene hoy una oportunidad de consolidarse como la tercera vía en un estado tradicionalmente bipartidista.

Pero eso solo ocurrirá si hay claridad, unidad y respeto por el trabajo realizado.

Lo demás, como se dice en el rancho, es puro ruido.

¡Saludos, jóvenes!